ANDREA LOBERA – Vitoria
La Red de Semillas de Euskadi ha realizado una primera fase de estudio para preservar y recuperar las variedades tradicionales del municipio de Vitoria.
La Red de Semillas de Euskadi ha llevado a cabo el proyecto `Diversidad, Uso y Manejo de las Variedades Tradicionales en el Municipio de Vitoria-Gasteiz´ con el fin de poner en valor y preservar las variedades vascas, en este caso, en el municipio de Vitoria. Es el primer proyecto de este tipo que se realiza en España en una ciudad de más de 200.000 habitantes.
Esta es la primera fase del estudio para la recuperación de variedades agrícolas tradicionales y desde la Red de Semillas de Euskadi esperan “que en las próximas fases de trabajo, el número de especies y variedades aumenten”.
Hasta el momento, en esta primera fase, han contabilizado 88 especies que cuentan con 277 variedades locales, pudiendo cada especie tener una variedad local o varias. Por ejemplo, el trigo, las patatas o los ciruelos cuentan con varias variedades, mientras que los cerezos o las grosellas tienen menos. Pero, ¿qué características deben presentar para ser consideradas variedades tradicionales? Joseba Ibargurengoitia de la Red de Semillas de Euskadi ha explicado que “en el caso de las semillas, consideran una variedad adaptada con un mínimo de 30 años y 60 años para una variedad tradicional y los frutales”.
Han llevado a cabo el estudio en cuatro áreas: la llanada occidental, la zona sur, la llanada oriental y la zona centro de la ciudad. En este caso, siendo zonas de clima frío, el número de especies y variedades se considera muy alto. “Habitualmente, nuestra alimentación en la sociedad actual, se basa entre 12 y 15 especies que nos proveen de hidratos de carbono, verduras, frutas, etc.” ha comentado Violeta Furlan de la Red de Semillas de Euskadi.
Han entrevistado a 15 personas —11 hombres y cuatro mujeres— con experiencia en la agricultura. “Teníamos un guion de entrevistas muy estructurado aunque la entrevista era más abierta y luego hicimos una transcripción resumida”, ha explicado Joseba Ibargurengoitia.
Con este proyecto han puesto de relieve la importancia de las variedades tradicionales de cultivo para la sostenibilidad de los agroecosistemas y la necesidad de recuperar nuestra memoria biocultural.
